La cotidianidad es un tema perfecto para la literatura, sobre todo para la narrativa, género donde un argumento simple puede tomar diversos matices dependiendo de la pluma que lo retrate. Si es un niño quien decide capturar con sus ojos su limitado conocimiento del mundo y su absoluta creatividad, un suceso del día a día puede convertirse en algo tan maravilloso como imposible.Qentos imposibles está compuesto por pequeñas historias captadas por la mirada y la imaginación de un niño: la gente, el pueblo, el agua, un tiburón, un ojo casi místico se vuelven parte y protagonistas de cada relato, de cada historia. ¿Cuánto de realidad hay en lo que nos muestra? ¿O es, acaso, que lo imposible realmente no lo es?